domingo, 3 de diciembre de 2017

Ogni istante è unico non tornerà mai più!


Nulla due volte
Nulla due volte accade
Né accadrà. Per tal ragione
Nasciamo senza esperienza,
moriamo senza assuefazione.

Anche agli alunni più ottusi
Della scuola del pianeta
Di ripeter non è dato
Le stagioni del passato.

Non c’è giorno che ritorni,
non due notti uguali uguali,
né due baci somiglianti,
né due sguardi tali e quali.

Ieri, quando il tuo nome
Qualcuno ha pronunciato,
mi è parso che una rosa
sbocciasse sul selciato.

Oggi che stiamo insieme,
ho rivolto gli occhi altrove.
Una rosa? Ma cos’è?
Forse pietra, o forse fiore?
Perché tu, ora malvagia,
dài paura e incertezza?
Ci sei – perciò devi passare.

Passerai – e in ciò sta la bellezza.

Cercheremo un’armonia,
sorridenti, fra le braccia,
anche se siamo diversi
come due gocce d’acqua.


Wislawa Szymborska


sábado, 22 de abril de 2017

Mamma ...

Mia dolcissima Mamma non mi lasci sii forte!

La madre è un angelo che ci guarda
che ci insegna ad amare!
Ella riscalda le nostre dita, il nostro capo
fra le sue ginocchia, la nostra anima
nel suo cuore: ci dà il suo latte quando
siamo piccini, il suo pane quando
siamo grandi e la sua vita sempre.

Victor Hugo







Las manos de mi madre
parecen pajaros en el aire
historias de cocina
entre sus alas heridas
de hambre.

Las manos de mi madre
saben que ocurre
por las mañanas
cuando amasa la vida
hornos de barro
pan de esperanza.


Las manos de mi madre
llegan al patio desde temprano
todo se vuelve fiesta
cuando ellas vuelan
junto a otros pajaros
junto a los pajaros
que aman la vida
y la construyen con los trabajos
arde la leña, harina y barro
lo cotidiano
se vuelve magico.

martes, 28 de febrero de 2017

La luna...




La luna

A Federico García Lorca

Ya nadie mira a la luna,
la luna ya no es de nadie;
ya no la cubren de besos,
ya no la bañan con sangre.

Ni ya le escriben poemas,
ni ya le clavan puñales;
ya no hay tragedias de amores,
ya no hay amor, no hay amantes.

Ya pasa sola la luna,
ya pasa sola, sin nadie;
ya no amontona secretos
ni alumbra sueños, como antes.

¿Adónde fuisteis, poetas,
adónde fuisteis, amantes,
que la dejasteis sin versos,
que sin amor la dejasteis?

Ya no es de nadie, ni es luna,
la luna que ahora nos sale;
porque es un círculo sólo,
y sólo un círculo errante.

Sólo un castillo arrumbado,
sólo un recuerdo distante;
sólo una historia en un libro,
sólo una estatua en un parque.

La luna no será luna
sin corazones que amen;
sin pensamientos que vuelen
y sin poetas que canten.

Y es esa luna, lunero,
la misma luna, no obstante,
que tú metiste en los versos
porque era tuya una parte.

Pero los hombres son otros
y otras las cosas que valen;
y otros los ojos que miran
y otras las formas de amarse.

La luna no será luna,
porque la luna es mirarse:
asesinar con los ojos
hasta el dolor de la sangre.

Del libro El cielo se hizo de amor (1986)

 
Mariano Estrada